Seguro que muchas veces has oído hablar del Tarot, de los horóscopos, etc… pero, seguro también que eres de las personas que no han hecho uso de estos servicios por motivos muy variados. Aquellas personas que se han decidido a probar siguen con este tipo de servicios para poder mejorar en su vida, conseguir cuanto necesitan, etc… Es por ello que nos gustaría darte a conocer cómo la videncia natural puede mejorar tu vida y las ventajas que te ofrece. Además, gracias a las nuevas tecnologías, podrás tener la comodidad que siempre has querido.
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Ventajas de la videncia natural
Loa videncia natural, también conocida como la videncia real, se trata de una videncia que no se aprende, sino con la que se nace. Es por ello que las mejores videntes del país son videntes que ya han nacido con un don. Sabemos que muchos han aprendido a hacer lecturas de las cartas del Tarot, pero también sabemos que son pocos los que acaban por interpretar correctamente el significado de las cartas. Aunque no lo creamos, los dones con los que los videntes han nacido son los que marcan la diferencia en el resultado de los servicios que nos prestan.
Así pues, podemos decir que la videncia natural tiene una gran ventaja frente a la aprendida y es que la información que conseguimos de ella es mucho más completa, precisa y más fiable.
Por otro lado, la videncia natural no solo es mejor en cuanto a las lecturas del Tarot, pues mejora todo tipo de lecturas y conjuros hechos para mejorar la vida de las personas. Por ejemplo, a la hora de realizar un amarre, podemos estar seguros de que será mucho más efectivo si la persona que lo conjura es una vidente natural que haya nacido con este don. No podemos decir que no lo podamos realizar nosotros en casa, por ejemplo, pero lo que sí es seguro es que no vamos a obtener los mismos resultados que si estuviera hecho por una vidente profesional.
El Tarot y la videncia natural en nuestro día a día
El Tarot es una de las herramientas que más se usan en la actualidad para conocer detalles de nuestra vida que nos ayuden a mejorar nuestro futuro. Sin embargo, y en comparación de hace unos años, no es necesario acudir a gabinetes en los que podemos conseguir estas lecturas del Tarot son. Se hace todo por vía telefónica.
Las ventajas de tener el Tarot online son muchas y una de las más destacables es que nos ofrece una gran comodidad. No solo no vamos a tener que concertar citas y pensar en los horarios del profesional y en los nuestros propios, así como tampoco deberemos estar pendientes de horarios.
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Pese a que el servicio se suele llevar a cabo, normalmente, por teléfono. Pero, también podemos conseguir información por email una vez tengamos a nuestro tarotista y siempre que lleguemos a un acuerdo con él.
Y, además, no podemos olvidarnos de mencionar que también podemos conseguir los servicios a mejor precio. Las tarifas son mucho más económicas que las de los gabinetes, ya que estos tienen muchos más gastos.
Servicios de videncia de nacimiento telefónica
Los servicios que nos pueden ofrecer estos tarotistas son de lo más completos, pues podemos escoger entre una gran cantidad de videntes y tarotistas de lo más profesionales. Es de lo más simple y cómodo acceder a las mejores vidente y tarotistas que hay en el país. Todas ellas, además de poseer una gran experiencia en el mundo de la adivinación, disfrutan de videncia natural, lo que les permite conseguir mejores resultados para los clientes.
Además, merece la pena destacar que cada una de ellas, destaca en un ámbito diferente. Por ejemplo, podemos mencionar a Esmeralda que es una gran profesional y dedicada al Tarot del Amor. Agatha destaca por sus habilidades a la hora de interpretar las cartas del Tarot. Otros servicios que los clientes pueden conseguir cómodamente y de manos de las mejores profesionales son la lectura simple de las cartas, los horóscopos Tarot, las cartas astrales y los conjuros y amarres, entre otros.
Con todo, el hecho de poder tener una vidente natural a nuestro servicio es algo que no tiene precio. Menos, cuando esta persona nos puede ofrecer las soluciones que hemos estado buscando a la hora de mejorar nuestras vidas. De todas estas soluciones, la que se diferencia más entre los videntes naturales y de los que han aprendido videncia, es que los primeros saben encontrar muchos más detalles en las lecturas que los otro. Además, los primeros pueden darnos mejores consejos y amarres dada la gran experiencia que ya tienen a sus espaldas.
Encontrar una buena vidente es algo que puede mejorar mucho nuestras vidas. Y, por ello, deberíamos tener presente estos servicios para incluirlos en nuestra vida diaria.
Videncia natural con Naya
Naya es una de las videntes naturales más eficaces que existen en estos momentos en España. Naya basa su método de videncia natural en la propia persona y su energía, tanto la que irradia hacia fuera y determina su relación con los demás, como la que recibe de su entorno y le influye de manera importante en su actitud, su capacidad de lucha y su amor propio. De tal manera que concibe al ser humano como un intercambio de energía que de una manera u otra infiere en su futuro.
De manera simplificada, como Naya suele decir “Una persona feliz tiene y crea un entorno feliz y, de manera análoga, un entorno feliz, con familiares hijos y amigos felices, generan en uno un presente feliz que determinará un futuro feliz. Mi tarea, entre otras, será esbozar un camino hacia esa felicidad a través del análisis de la persona y su entorno.”
Para lo anterior, Naya cuenta con su enorme poder de vidente natural, heredado de su abuela y su maestría en el Tarot. Todo ello, según la propia Naya, lo enfoca y lo canaliza en una energía sanadora y curativa, tanto del interior de la persona como del entorno en el que se mueve e interacciona.
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Breve presentación del método de Videncia Natural Sanadora
El método de Naya es quizá uno de los más poderosos y profundos que se conocen hasta hoy. Como ya hemos dicho, la concepción de Naya se basa en el intercambio de energía del ser humano con el medio en el que se desarrolla, y como ello puede generar distintos problemas y una progresión hacia el futuro donde dichos problemas se perpetúan en la mayoría de los casos.
Naya, dentro de su método de videncia natural sanador, propone tres núcleos o vectores de energía que ella, con su método se encarga de analizar y de “sanar”:
- Núcleo interno. Es aquel que se genera dentro de la propia persona que llama. Viene a definir distintos tipos de personas y problemáticas. Por ejemplo, Naya suele comentar que muchas personas le preguntan por qué no dan con el amor de su vida, ellos siempre miran hacia fuera, cuando, según afirma la propia Naya “muchas veces el problema está en su interior, en la forma de falta de confianza, actitudes no demasiado buenas, etc. Yo seré quien le haba ver ese tipo de carencias o defectos y quien, desde el núcleo interno de energía que se genera dentro de la persona, establezca una hoja de ruta hacia el futuro, aconsejando situaciones, o lugares o actitudes o encuentros o incluso un análisis de su entorno ya que, muchas veces, no deparamos que en que el amor de nuestra vida está delante de nosotros.”.
- Núcleo o vector externo. Es aquel que se genera mediante la receptividad del propio individuo a través del entorno. Nuevamente Naya identifica la relación de la persona con una identificación con el entorno. Ella siempre dice “un entorno feliz genera personas felices y optimas, luchadoras. Un entorno infeliz y problemático, genera, a la larga personas abatidas, deprimidas y en plena crisis. Para Naya el individuo tiene la capacidad de cambio de su entorno, pero también tiene la influencia energética de su contexto social. En este caso Naya es capaz de analizar nuestras relaciones sociales, nuestro contexto y disociar aquellas personas o situaciones que verdaderamente están provocando una crisis interna o problemas de salud.
- Núcleo de videncia individual. El tercer elemento del método de Naya es el desarrollo de un plano de la persona. Gracias a su videncia puede saber y percibir claramente distintos aspectos astrales y energéticos de la persona. Otro elemento esencial que la mayoría de los videntes no tienen en consideración.
Naya es una vidente natura que de verdad acierta
Me llamo Naya María, aunque yo prefiero que todos me llamen Naya y soy vidente natural. Ya desde pequeña podía sentir distintas sensaciones en clase o con mis amigos. Fue en mi adolescencia cuando acepté el don que mis ancestros me habían legado y decidí dedicar mi vida y todos mis esfuerzos a ayudar a las personas.
Poco a poco me fui interesando por el mundo del esoterismo, del Tarot y de la sanación. Por otra parte, domino el Tarot de Marsella, y el Tarot Gitano. Creo que el Tarot puede ayudarnos a esbozar unas directrices generales tanto de nuestro pasado como de nuestro presente y su tendencia al futuro. El Tarot es aporte de información, básicamente, lo cual puede ayudar a decidir qué opción es mejor.
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La videncia aporta profundidad, claridad y fidelidad. La videncia es un valor añadido que, verdaderamente, muy pocas personas pueden aportar. Para mí son esenciales las personas; su dimensión humana y su dimensión trascendental. Creo que para que una persona esté feliz, tanto su energía como su entorno tienen que estar dotados de una positividad. Por todo ello, en mi método de videncia, incluyo varios factores o núcleos de videncia que tienen relación con el fluir de energías y nuestra relación con el medio (un núcleo interno, que viene a definir el interior de la persona, un núcleo externo, que acapara la relación con los demás, en presente y futuro y por último un núcleo de videncia individual, en el que incluyo a la persona en un espacio y un tiempo determinados, con una proyección hacia el futuro).
Naya: experta tarotista y vidente natural
Repito, no entiendo la felicidad en una persona, si sus hijos, o su marido, o su novia, o su familia no están felices. Soy experta en todo tipo de cuestiones, pero en especial tengo alto dominio de situaciones que describen el entorno familiar, el entorno personal, el entorno laboral y el entorno anímico de la persona.
Como he dicho antes, además tengo el poder de la sanación. Ello se debe a la canalización de toda mi energía, a través de la videncia, enfocada a sanar a las personas, tanto interna como externamente. Antes solía hacer imposición de manos, pero desde hace unos años decidí que el mejor método, que la mejor manera de ayudar a las personas, tal y como he enfocado mi método es a través del teléfono. No se requiere, al menos por mi parte, el tacto con otra persona para sanar su alma o su cuerpo. El vínculo lo creo a través de la voz y de las energías que se infieren de una persona a otra. En este caso, en mi método de videncia se puede hablar de dos direcciones de picos de energía:
- De la persona que me llama hacia mí. En este pico de energía, obtengo a través de la voz y gracias a mi poder de vidente, las cuestiones más esenciales y básicas. Es según vamos hablando, como poco a poco el “mapa personal” de esa persona se va dibujando claramente en mi mente. Un mapa que, evidentemente, abarca un plano espiritual y otro físico-personal
- De mi persona hacia la persona que me llama. En este caso, mi valor añadido, es mi propia naturaleza de vidente natural y la canalización de toda mi energía en “sanar” anímica y espiritualmente a la persona que me llama, lo que creo que me diferencia de los demás
Para terminar diré que gracias a la opción de poder realizar consultas telefónicas he podido conocer a grandes personas, mis amigos, y ayudarles. Creo que yo les he ayudado, quizá incluso, según dicen muchos, hasta les he cambiado la vida, pero ellos a mí me han aportado conocimiento, amistad, energía y tantas cosas bellas y hermosas que no soy capaz de describir. Esta precisamente, es la causa, de estas palabras que terminan aquí, agradecer a todos mis amigos sus llamadas y su confianza.
Videncia Natural: un don de la Naturaleza
Cuando hablamos de videncia natural, en muchas ocasiones no se depara en la profunda trascendencia del propio término. En este artículo se profundizará sobre el concepto y se desarrollará una serie de conceptos esenciales para aprender a discernir entre una vidente natural y la que no lo es.
En esencia, el concepto de “vidente” implica el rasgo de “natural”, ya que toda vidente, o persona que tiene la capacidad innata de sentir o intuir distintas cuestiones vinculadas con el futuro, presentan, por definición, este rasgo desde su propio nacimiento.
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Vidente Natural: videntes de nacimiento
La concepción de “vidente natural”, por lo tanto abarca un periodo cronológico (toda la vida) y una condición intrínseca a esa persona (el desarrollo de una capacidad perceptiva heredada de un ancestro).
La ciencia no encuentra una explicación lógica para este fenómeno que muy pocas personas logran desarrollar, sin embargo, la mera existencia de este tipo de desarrollo intelectivo y cognitivo hace que se planteen diversas y variadas explicaciones. En realidad, existen intentos de definición según el enfoque y la cultura en la que se desarrolla el fenómeno: para la ciencia este hecho supone un desarrollo de distintas capacidades cerebrales e intelectuales. Ello viene desarrollado a partir de una marca genética heredada y una predisposición de la persona para el desarrollo de dichas cualidades a lo largo de su vida.
Existen también teorías vinculadas con la “gracia de Dios” o un desarrollo de la parte perceptiva y extrasensorial del ser a partir de determinadas experiencias o vivencias ocurridas durante la infancia.
Sea como fuere, una verdadera vidente natural es una persona con la suficiente capacidad cognitiva e intuitiva como para saber de nosotros aquello que nos preocupa, sin necesidad de tarot. Existen muchas videntes que se anuncian como “videntes naturales”, sin verdaderamente serlo. Debemos ser precavidos en este punto, ya que una vidente que no tenga en su naturaleza esta capacidad de percepción o este “don” puede llevarnos al engaño y a decepciones serias y lesivas para nosotros mismos.
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Cómo distinguir una vidente natural
Algunas de las cuestiones que nos aportarán información sobre la vidente a la que recurrimos pueden ser:
- Una vidente natural no suele hacer demasiadas preguntas. La propia capacidad intuitiva es suficiente para saber y conocer sobre la persona que le consulta.
- Una vidente real debe, siempre, iluminarnos, aportar luz y claridad sobre lo que deseamos saber. No debe andarse con rodeos.
- Una vidente natural debe saber comunicar, transmitir e iluminarnos por dentro. Parte del trabajo de una vidente natural no es solo adelantarse al futuro, a nuestro futuro, también lo es iluminarnos y aportarnos paz y serenidad interior.
- Una vidente verdadera sabrá siempre la mejor manera para ayudarnos y para aconsejarnos sobre las consultas realizadas.
- Por otra parte, una verdadera vidente natural jamás atenderá la llamada desde un call-center. Si intuimos que es así, deberemos despedirnos cortésmente y colgar la llamada. Las videntes naturales, las verdaderas, siempre trabajan desde casa, en soledad y bajo la reflexión de un espacio dedicado para ello, puede ser un estudio o una habitación de su propia casa
- Una verdadera vidente natural sabrá captar nuestra energía y crear un vínculo a través de nuestra voz y nuestra pregunta, de manera telefónica. El teléfono facilita la comunicación y la no interferencia entre distintas energías, por lo tanto se podría decir que lo óptimo para una consulta con una vidente natural.
Si tenemos en consideración los anteriores parámetros, podremos estar seguros de que la persona con la que hablamos es una verdadera vidente natural, pudiendo huir de verdaderos engaños y fraudes. La confianza, nuestra confianza es una cuestión de la que puede depender muchas cosas en nuestra vida como el bienestar, el equilibrio mental y la esperanza.
Fundamentos de la Videncia Natural
La videncia natural es una cuestión tan antigua como la propia existencia de ser humano. Ya desde tiempos remotos existen testimonios de personas que poseían el poder de la clarividencia en edades muy tempranas. Dichas personas, por otra parte, solían, en según qué épocas, ser castigados incluso con la muerte si demostraban en público que poseían este “don”, en otras épocas eran y aún hoy siguen siendo, en determinados contextos, marginados, apartados socialmente y tachados como “personas raras”.
Por otra parte, podríamos decir que la videncia natural es aquel don que una persona-vidente posee desde su nacimiento y que va desarrollando con los años.
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El don de la Videncia Natural
Es cierto, otro hecho a tener en cuenta, que muchos de esos videntes fracasan en su intento de desarrollar dicho don de clarividencia natural debido a que, muchas veces, se ven abrumados ante el cúmulo de visiones y sensaciones diferentes. Es también dramático saber o intuir determinados hechos, negativos, que el destino puede deparar a una persona o un grupo de gente. Hay quienes no pueden canalizar tal presión, tal sentimiento, por ello deciden, voluntariamente, dejar o intentar acallar dicha habilidad. Aún así, es complicado despojarse de un poder tan profundo y natural como este que nos ocupa, por ello se podría concluir que, aunque algunos no consigan desarrollarlo (porque no quieren, no pueden o su entorno les es hostil), no significa que dejen de poseerlo
En principio, el vidente natural tiene un nivel intuitivo y precognitivo mucho mayor que el resto de las personas. Desde un punto de vista científico, determinadas partes de su cerebro están más desarrolladas. Algo esencial es que, con el tiempo, dichas personas con esta capacidad, aprendan a dominar y gestionar sus habilidades y enfocarlas, canalizarlas en ayudar a otras personas, bien sea a modo de oráculo, analizando y aportando información sobre distintas circunstancias y hechos futuros o, por otra parte, profundizando en el interior de la persona, iluminando y fomentando todas aquellas capacidades y energías que tenemos dentro, pero que a veces no sabemos desarrollar.
Videntes de nacimiento
Como se puede intuir, la videncia natural tiene mucho que ver con el nacimiento de una persona, pero también es esencial el desarrollo de dicho “don” durante toda su vida, lo cual requiere comprensión y aceptación en el entorno de convivencia y familiar. Además, es esencial también que la persona sepa, como ya hemos dicho, canalizar y enfocar dicho poder.
En la mayoría de los casos se pueden encontrar antecedentes de personas que han desarrollado una videncia natural y sus padres o determinados ancestros también poseían estas facultades. Es lo que los expertos llaman “legado natural”; no siempre se produce de una generación a otra, ni de padres a hijos. En según qué contextos y qué familias, podemos encontrar una o dos generaciones que, aparentemente no han llegado a desarrollar tal cualidad, al menos ninguno de sus miembros han mostrado poseerla.
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Este hecho anterior, llevo a los expertos a conjeturar que para la adquisición de tal “don”, se requiere, además de un antecedente genético, cierta predisposición mental y energética. De tal manera que solo determinadas personas, sensibles y con gran capacidad intuitiva eran capaces de desarrollar dicha videncia natural.
Hay quien sostiene que, a veces, cuando alguien tiene esa “capacidad” aún no desarrollada y en su infancia sufre un accidente o está cerca de la muerte, dicho “don” se activa mediante el desarrollo de distintas capacidades cerebrales. Son, en este sentido, muchos los ejemplos que ilustran dicha teoría.
Sea como fuere, la videncia natural es un don que sólo unos pocos poseen, en nuestro caso, nuestros videntes, ponen al alcance de todos una vida entera dedicada al perfeccionamiento y desarrollo de dicha videncia natural, en loor de una ayuda y una iluminación interior que nos ayude a ser mejores con nosotros mismos y aspirar a la esquiva felicidad.